Postura del ISHRS sobre Finasteride
Desde 1998, el Finasteride (Propecia) ha sido utilizado con éxito en millones de hombres con alopecia androgenética, y una incidencia de efectos secundarios relativamente baja. Recientemente varios artículos en la prensa y en la literatura médica han descripto un número de pacientes jóvenes con alopecia androgenética quienes refirieron padecer efectos persistentes luego del uso y posterior suspensión del finasteride. La Sociedad Internacional de Restauración Capilar (ISHRS) ha establecido un Grupo de Trabajo para evaluar las Controversias sobre «Efectos Adversos del Finasteride» publicadas y para informar y actualizar a los médicos que forman esta sociedad sobre el uso de dicho medicamento.
Hasta la fecha no hay datos consistentes basados en la evidencia que puedan vincular al finasteride con la persistencia de efectos secundarios de tipo sexual en ninguno de los numerosos estudios doble-ciego realizados; estudios contrastados estudiando las diferentes reacciones a placebo y finasteride 1 mg en pacientes con caída de cabello.
Los comentarios sobre efectos sexuales persistentes han aparecido en diferentes fuentes, principalmente internet. Sitios que atraen a las personas e invitan a exponer sus experiencias sobre efectos secundarios sexuales y asuntos psicológicos relacionados con finasteride.
Desde que una encuesta publicara que la dificultad para tener una erección continuase durante un largo tiempo, después de suspendido el finasteride en una mínima proporción de pacientes, la incidencia de dicho problema es actualmente desconocida. Este raro efecto secundario está incluido en el prospecto de Merck en los Estados Unidos; en Public Assessment Reports of the Medicines and Health Regulatory Agency de Inglaterra; y en la Medical Products Agency en Suecia. El 11 de abril de 2012, la FDA (US Food and Drug Administration) anuncio cambios para el prospecto de Propecia (finasteride 1mg) y Proscar (finasteride 5 mg) expandiendo la lista de efectos secundarios de tipo sexual reportados a la FDA ya que algunos efectos habían persistido luego de suspender la medicación (nota: la disfunción eréctil luego de discontinuar el uso de finasteride fue agregado como efecto secundario conocido en 2011). El nuevo prospecto incluye los siguientes cambios:
- Una revisión del prospecto de Propecia que incluye desordenes de líbido, en la eyaculación y en los orgasmos que podrían continuar después de suspendida la medicación.
- Una revisión de Proscar que incluye disminución de líbido que podría presentarse incluso después de dejar la medicación.
- Una revisión para ambos, Propecia y Proscar, que incluye una posibilidad de baja calidad del semen, que normaliza o mejora después de suspendida la medicación.
A pesar de que no han sido establecidas unas causas determinantes que vinculen el finasteride (Propecia o Proscar), a los efectos secundarios sexuales, los casos aparecidos sugieren un rango más amplio de efectos adversos de los que hasta el momento han sido registrados en pacientes bajo tratamiento. La información sobre estos efectos segundarios puede ser importante para determinados pacientes. Por lo tanto, médicos y pacientes necesitan estar alertados e informados sobre dichos efectos, como parte de la discusión sobre riesgo/beneficio a la hora de decidir la mejor opción de tratamiento.
La persistencia de efectos secundarios sexuales parece ser de rara aparición, y todavía debe determinarse si la aparición de estos casos representan una verdadera relación causa-efecto, o si son simplemente coincidentes
y relacionados a otros factores como ser la disfunción sexual de la población en general y/o efecto placebo. Tampoco hay datos respecto a los antecedentes médicos y psicológicos de esos pacientes para excluir otros posibles efectos causales. Hasta la fecha el mecanismo de interacción entre el cerebro, la 5-alpha-reductasa y las hormonas en la disfunción sexual es especulativa y pobremente entendido.
Claramente, éste es un tema complicado, que se superpone con otras disciplinas médicas como son la Endocrinología, la Urología y la Psiquiatría. Es necesario realizar más investigaciones para poder establecer la incidencia real actual de efectos adversos,
determinar si hay una causa real entre la medicación y los efectos persistentes y, de ser así, quienes están en riesgo. Esperamos poder participar en charlas multidisciplinarias para mayor evaluación de este tema.
Millones de pacientes se han beneficiado con el uso del finasteride sin efecto secundario alguno o con mínimos y reversibles.
Es importante para la comunidad médica el verificar reportajes anecdóticos y, de ser necesario, realizar nuevos estudios para poder brindar a los pacientes información precisa para que puedan tomar una decisión acertada y consentida respecto al uso de la medicación. El grupo de trabajo del ISHRS en Controversias sobre Efectos Adversos del Finasteride está en proceso de juntar información y formar un panel interdisciplinario para dirigir estos asuntos y mantener informado a los miembros del ISHRS de los efectos adversos post-marketing.